La verdadera pandemia que enfrenta nuestra humanidad es una pandemia de desconexión con el Alma.

En cada área de la vida, se nos enseña a ignorar, suprimir y dudar de nuestras voces internas a favor de lo que nos dice la sociedad en general. Nuestros sistemas de gobierno, educación y noticias, así como nuestros medios sociales y de entretenimiento, nos condicionan a vivir en un estado fragmentado de miedo y ego.
 

Debido a nuestra falta de conexión interna, nuestra vida exterior puede parecer difícil e insatisfactoria y nuestro interior se siente vacío y plagada de todo tipo de sufrimientos. Al desconectarnos de nuestra Alma perdemos también la conexión con nuestros valores, necesidades, poder y sueños mas íntimos condonándonos a una vida en "silenciosa agonía”. Y así nos volvemos adictos a la próxima emoción barata en busca contante de una explosión de dopamina y esclavos de lo que sea que otras personas quieran que nosotros seamos.

Esencialmente, parece que nunca podemos deshacernos de la sensación de que algo muy importante “no está bien” en nuestras vidas. Nada de lo que hacemos parece traer alivio a la decepción e infelicidad que se vive en nuestro Mundo, y es entonces cuando comenzamos a padecer enfermedades como ansiedad, depresión, adición y enfermedades crónicas de todo tipo.

Lo anterior es la raíz de todos los llamados "Problemas del Mundo". La pobreza, el sufrimiento, la corrupción, la polarización, el control, la violencia y la discriminación, entre otros males, nos condenan cada día a vivir en un medio hostil para nuestra Alma que nos pone cada día, cara a cara, con la posibilidad de la extinción de nuestra raza humana.

Aunque esta realidad (que ya ninguno de nosotros puede seguir negando) pueda parecer desalentadora, no todo esta perdido. Colectivamente hoy tenemos una oportunidad única que nos permite acceder a una verdad mucho mayor y es sobre lo que esta basada la filosofía LumKa... "¡Los problemas del Mundo nos son más que una proyección de las limitaciones de nuestra Alma!", por lo que la solución a estos no está luchando contra ellos afuera, sino abrazándolos en nuestros adentros. 

¡Por esto y para esto he creado LumKa, para abrazarnos en Unidad Divina danzando al compás del Latido Divino que dice... "Amor, Libertad, Unidad, Verdad, Paz, Luz, Musa". Juntos vamos nuevamente a sentar a nuestra Alma en su trono Divino.